Paralelamente a todos los anuncios relativos al agua del Júcar -relacionados directa o indirectamente-, Pérez Castell también mencionó el depósito de 20.000 metros cúbicos que se va a construir junto a la depuradora de Albacete y que va a servir para recoger todas las aguas pluviales antes de que entren en ésta. Un depósito que va a suponer una inversión de 4,3 millones de euros, que se ha conveniado con la Confederación Hidrográfica del Júcar.

La novedad de este proyecto es que el pasado 24 de abril se reunió la Mesa de Contratación, en la Confederación, para abrir el periodo de presentación de ofertas de las empresas que opten a construirla.

La Sala Tercera del Tribunal Supremo acaba de ratificar la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha del año 2000, por la que se anulaba el pliego de condiciones que el Pleno del Ayuntamiento utilizó en el año 1997 para la adjudicación a Aquagest del sistema de gestión, mediante concesión administrativa, de la gestión integral del agua en Albacete. Una gestión que incluía la captación, distribución y suministro domiciliario de agua potable, evacuación y tratamiento de aguas residuales y recaudación de las tasas por prestación de dichos servicios.

Se vuelve a dar la razón al Grupo Municipal de Izquierda Unida, que fue quien votó, en aquel entonces a través de su portavoz, José Eduardo Martínez Valero, en contra del acuerdo plenario que desestimó las alegaciones que se habían presentado y que dio la concesión a Aguagest. Un Pleno que en 1997 estaba presidido por el alcalde del PP, Juan Garrido.

Entre otras cuestiones, en los Fundamentos de Derecho de la sentencia se recoge que, ante el expediente de adjudicación de la gestión del agua a Aquagest se presentaron 9.044 alegaciones y que éstas fueron estudiadas por la propia empresa mercantil del proyecto, que «hizo un informe rechazando cualquier incidencia de las mismas y proponiendo su desestimación por el Pleno», que, en efecto, el 29 de abril de 1997 desestimó todas estas reclamaciones formuladas. Contra esta actuación votó en contra Izquierda Unida cuestionando tanto la legalidad del procedimiento, como el hecho de que el informe de las alegaciones lo hubiera realizado la empresa redactora del proyecto y no los técnicos municipales.

Experiencia, sí o no

El Supremo considera, por otra parte, y en relación al pliego de condiciones que sirvió para adjudicar el suministro a Aquagest, que «la impugnación del meritado pliego por un miembro de la Corporación que votó el correspondiente acuerdo aprobatorio conduce a que se tenga por cuestionada, aunque no lo hubiera sido por ninguno de los partícipes en el concurso convocado». Es decir, aunque las empresas que concurrían al concurso de adjudicación no mostraron su disconformidad con el procedimiento seguido y el pliego, como sí lo hizo IU a través de su portavoz votando en contra, la validez de este voto para tener en cuenta la impugnación del acuerdo es la misma.

En ese sentido, IU alegó que se tuvo en cuenta como criterio para la adjudicación del contrato la experiencia, cuando en el pliego de condiciones, entre todos los criterios a los que se hacía referencia como puntuables, precisamente la experiencia no aparecía.

Por todo ello, la sentencia del Supremo estima parcialmente el recurso contencioso-administrativo que en su día interpuso IU contra el acuerdo plenario del 29 de abril de 1997 y anula el apartado a) del pliego de condiciones, el referido a los criterios de adjudicación.

Ante esta sentencia del Supremo, Izquierda Unida expresaba ayer su satisfacción porque «se confirma la nulidad del pliego de condiciones que sirvió de base para adjudicar el contrato del servicio de agua y saneamiento de Albacete, ya que se tuvo en cuenta un factor, el de la experiencia, que en estos casos, tal y como establece la sentencia no es un criterio de adjudicación».

IU añadió que sus servicios jurídicos están estudiando con detenimiento la totalidad de la sentencia. En todo caso, según Rosario Gualda, portavoz de la formación, «se confirma no sólo que la privatización de un servicio tan esencial como es el del agua fue perjudicial para Albacete, sino que además se hizo de manera incorrecta desde un punto de vista contractual».

Finalmente, Rosario Gualda recordó que fue su grupo municipal quien recurrió esta sentencia y señaló que seguirá trabajando para que el Ayuntamiento recupere la gestión pública del ciclo integral del agua.

Aguas de Albacete

Por su parte, el alcalde de Albacete, Manuel Pérez Castell, manifestaba ayer que «la creación, en 2006, de la empresa mixta Aguas de Albacete, por la que el Ayuntamiento recuperaba el control público sobre el abastecimiento de agua potable a la ciudad evitará que ahora tengamos que sufrir las consecuencias de la mala gestión que llevó a cabo el PP para privatizar el agua de Albacete y que reiteradamente ha sido condenada por los tribunales, incluido el Tribunal Supremo como establece una esta sentencia».

«Política y administrativamente -dijo Pérez Castell- el Ayuntamiento ha subsanado la mala gestión que en este tema hizo el PP y ahora el abastecimiento de agua potable a la ciudad vuelve a estar bajo control público».

El equipo de gobierno municipal ha esquivado, de momento, el ‘mazazo’ que suponía para el Ayuntamiento de Albacete y para las arcas municipales la sentencia del Tribunal Supremo que salía a la luz la semana pasada. Una sentencia que viene a dar la razón a la que ya dictó en el año 2000 el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha, dando la razón a un recurso contencioso-administrativo interpuesto por Izquierda Unida.

El Supremo vuelve a ahora anular -como ya hizo el TSJ- el primer punto del pliego de condiciones por el que, en 1997, se adjudicó a Aquagest la gestión del ciclo del agua. Al anularse ese punto del pliego, supondría consecuentemente la anulación de todo el pliego y, por tanto, invalidar la adjudicación a aquella empresa.

Y eso, como reconoció ayer el alcalde de la ciudad, Manuel Pérez Castell, al admitir que «el pliego de condiciones elaborado por el PP para la concesión de la gestión a una empresa fue ilegal y la concesión estuvo mal hecha». Añadió, además, Pérez Castell, que compareció ante una multitud de periodistas, «hubiera supuesto para el Ayuntamiento pagar 36 millones de pesetas». Una cantidad procedente de la devolución del canon de 12 millones de euros que se pagó en su momento (los dos mil millones de pesetas famosos que tantas veces han utilizado los representantes políticos municipales en sus debates) y otros 24 millones de euros de indemnización.

Solución a tiempo

«De no haber constituido inteligentemente la sociedad mixta ‘Aguas de Albacete’ tendríamos que haber indemnizado a Aquagest con 36 millones de euros», insistió Pérez Castell, que estuvo acompañado en su comparecencia por los concejales de Hacienda, Antonio Martínez, y de Sostenibilidad, Ramón Sotos.

Según contó el máximo responsable municipal, el equipo de gobierno socialista «era consciente» de que el tribunal Supremo podía dictar este auto, como así ha hecho, y «por ello creamos ‘Aguas de Albacete’ y así el municipio se ha ahorrado» esa cantidad millonaria.

Y es que desde el equipo de gobierno consideran que, cuando se creó Aguas de Albacete (donde el Ayuntamiento tiene el 26% de las acciones), se acabó con la adjudicación a una empresa privada (Aquagest) y se comenzó una nueva etapa con un sistema de gestión a través de una empresa mixta. Al no existir ya la adjudicación que se llevó a cabo en el año 1997, cuando gobernaba el Ayuntamiento el PP, no hay posibilidad de aplicar la sentencia. «Lo que dice el Tribunal Supremo es inejecutable porque tal empresa ya no gestiona el agua de Albacete», aseguró Pérez Castell.

De aquella adjudicación, insistió el alcalde, «no queda nada y hemos sido liberados de aquellos perjuicios que habríamos tenido que afrontar».

De momento, con esta solución el Ayuntamiento esquiva un grave problema económico que habría tenido que afrontar de continuar siendo Aquagest la adjudicataria. «La ciudad le ha ganado al PP en esto del agua», sentenció Manuel Pérez Castell, que acusó al PP de «haber actuado de un modo esquizofrénico» en materia hídrica, primero con la adjudicación a Aquagest en el año 1997 y más tarde con el intento de que los tribunales anularan la sociedad mixta ‘Aguas de Albacete’.

Por último, dentro de la batería de novedades ofrecidas ayer por Pérez Castell, ofreció dos más, fruto de una reunión mantenida el pasado 24 de abril entre el alcalde, el concejal de Hacienda, Antonio Martínez, y responsables del Ministerio de Medio Ambiente en Madrid. «Hemos conseguido que el 100% de la obra de construcción de la planta de ósmosis será financiado por el Ministerio de Medio Ambiente», dio a conocer Pérez Castell. Una planta que costará algo más de 9 millones de euros, de cuya construcción se encargará Lubasa (empresa que ha construido ya en Albacete los tres aparcamientos subterráneos) y que la previsión de que esté acabada sea en la primavera de 2009.

«Objetivo conseguido», subrayó el alcalde, que añadió que «en esto, el PP tampoco tiene nada de qué presumir sino más bien que arrepentirse» porque «en numerosas ocasiones» ha defendido que esta planta no era necesaria o que «un poco de colesterol o sulfatos en el agua» no eran perjudiciales.

Petición plenaria

En aquella reunión ministerial se abordó otra posibilidad, que se va a solicitar formalmente a través del Pleno municipal del próximo 10 de mayo: pedir al Ministerio de Medio Ambiente que ‘Aguas de Albacete’ se encargue también de la gestión del tramo donde se capta el agua del Trasvase Tajo-Segura para, de ahí abastecer a la capital, y de la planta de tratamiento y potabilización, dos cuestiones de las que aún se encarga Aguas del Júcar y que, de lograrse, «la ciudad tendría realmente la gestión del ciclo integral del agua». Al parecer, Aguas del Júcar acaba su concesión sobre estas dos cuestiones el próximo mes de junio aunque, de no concedérsele la solicitud todavía al Ayuntamiento, podría prorrogarse hasta la primavera de 2009, cuando esté finalizada la planta de ósmosis porque, para el alcalde, «ésa sería la solución ideal».

El Ayuntamiento de Albacete gestionará el ciclo integral del agua de consumo humano a partir de la primavera de 2005 cuando entre en funcionamiento la planta de ósmosis que dará «máxima» calidad al agua de abastecimiento, aunque las tarifas no sufrirán variación en los próximos 25 años.

Así lo anunció en rueda de prensa el alcalde de Albacete, Manuel Pérez Castell, quien señaló que mantuvo una reunión el día 24 de abril con representantes del Ministerio de Medio Ambiente a los que solicitó que sea el Consistorio el encargado de administrar todo el ciclo del agua de abastecimiento a la ciudad.

En concreto, Pérez Castell explicó que el Ayuntamiento no gestiona la captación de agua desde el trasvase Tajo-Segura, así como la planta de tratamiento que administra la empresa Aguas del Júcar, de modo que «sea público todo el ciclo del agua», y dijo que lo solicitará en el mes de mayo.

Asimismo, el alcalde informó de que será el Ministerio de Medio Ambiente el que financie «al cien por cien» la planta de ósmosis que ya está adjudicada a la empresa Lubasa y que costará aproximadamente nueve millones de euros, «entrará a funcionar en la primavera de 2009 y lo hemos conseguido a pesar de la oposición del PP».

Respecto al partido de la oposición, Pérez Castell afirmó que el grupo popular «debe arrepentirse de su actuación obstruccionista para conseguir para Albacete agua de la máxima calidad».

Además, el alcalde adelantó que ha firmado con la Confederación Hidrográfica del Júcar un convenio para la construcción, por 4,3 millones de euros, de un depósito de pluviales con capacidad para 20 millones de litros de agua, que recogerá el agua de lluvia antes de que pase a la depuradora «para conseguir una depuración más y mejor», y que estará en funcionamiento en la primavera de 2008.

Por otro lado, Pérez Castell mostró su satisfacción porque el Tribunal Supremo ha emitido una sentencia por la que anula la privatización del servicio de agua que realizó el PP en favor de la empresa Aquagest y que recurrió IU.

El alcalde destacó que si el Tribunal Supremo hubiera dado la razón al PP, «el Ayuntamiento habría tenido que pagar 36 millones de euros de indemnización a la empresa Aquagest», y señaló que la sentencia declara ilegal el pliego de condiciones del PP por el que se cedía la gestión del agua a Aquagest.

«El Ayuntamiento consciente de que el pliego de condiciones podría ser ilegal, creó la sociedad mixta Aguas de Albacete para la gestión del agua, y se ha ahorrado 36 millones de euros» y agregó que el PP «ha actuado de modo esquizofrénico en el tema del agua».

Castilla-La Mancha está de enhorabuena. Ayer, la consejera de Obras Públicas, María Encina Álvarez, ocupó, en representación de la región, y por primera vez en la historia, el «sillón» que la Junta venía reclamando en el órgano de gestión de la cuenca del Tajo. Una institución en la que, a pesar de que se determinaban cuestiones que afectaban a Castilla-La Mancha en materia hidráulica, la Comunidad no tenía hasta ayer ningún poder de decisión.

Se trata de un «gran paso hacia delante», en palabras de Álvarez, quien remarcó que el cambio experimentado deriva del acuerdo firmado por el presidente de CLM, José María Barreda, y la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, en marzo de 2005, que supuso, dijo, que «nunca más» la comunidad autónoma «quedara al margen de las decisiones para con Castilla-La Mancha».

La consejera de Obras Públicas apuntó que la incorporación de CLM a la gestión del Tajo no podía comenzarse de mejor forma que aprobando las últimas obras que quedaban por poner en marcha contempladas en el Programa AGUA para la región. Un plan, recordó, que supondrá una inversión total de más de 670 millones de euros en distintas infraestructuras.

Así, el primer Consejo de Administración de la Sociedad Estatal de Aguas de la Cuenca del Tajo dio luz verde, según explicó el presidente de la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT), José María Macías, a la construcción de 15 nuevas estaciones depuradoras en la provincia de Guadalajara, que han sido declaradas de interés general en el Plan Hidrológico Nacional.

La inversión prevista en las mismas es de 22 millones de euros y el objetivo es que las aguas residuales que se generen retornen al río con la mejor calidad reduciendo los focos contaminantes del Tajo.

Estas nuevas quince depuradoras se unen a las 22 que ya están pendientes de adjudicación en la provincia de Toledo con el mismo fin y que, aunque en un principio las iba a ejecutar la Junta, han sido asumidas por la CHT para financiarlas con fondos estructurales de la Unión Europea por valor de 45 millones de euros.

Asimismo, el Consejo de Administración aprobó una inversión de 17 millones de euros para ampliar la Estación de Tratamiento de Agua Potable de Talavera de la Reina (Toledo), que permitirá garantizar el suministro de agua en cantidad y calidad suficientes a 161.086 habitantes, que es la población prevista para el año 2030 en los municipios de esta comarca.

nueva oficina de la sociedad estatal. Por último, se aprobaron los pliegos de contratación de las obras de abastecimiento a los municipios que integran las mancomunidades del Girasol, en Cuenca, y de Algodor, en la provincia de Toledo.

Tras la reunión, la consejera de Obras Públicas visitó la nueva oficina que la Sociedad Estatal de Aguas ha instalado en la capital regional con el objetivo de agilizar las actuaciones que Aguas de la Cuenca del Tajo está ejecutando en Castilla-La Mancha.

En este sentido, María Encina Álvarez valoró el «acercamiento» de la autoridad hidráulica al territorio al que afectan sus decisiones, pues «es muy importante» que las mismas se tomen conociendo la realidad sobre el terreno.

La consejera de Obras Públicas, finalmente, aprovechó para felicitar públicamente a la CHT su eficacia.

«Por cuatro días de lluvia no podemos actuar como nuevos ricos con el Trasvase»

s.r.n. / toledo

La lluvia de los últimos días hace que en CLM se mire con preocupación hacia el Trasvase Tajo-Segura por la posibilidad de que desde Murcia se vuelva a exigir una nueva derivación de agua. Por ello, ayer la consejera de Obras Públicas, María Encina Álvarez, tras destacar la importancia de que llueva para terminar con la sequía, pidió «sensatez y responsabilidad», pues, a su juicio, «no podemos actuar como nuevos ricos» pensando que la lluvia de cuatro días pueden solventar la situación de sequía de tres años.

Recordó que ya el año pasado hubo un momento de recuperación de las reservas de agua en la cabecera pero incidió en que abril es el último mes que en teoría nos queda como mes lluvioso y que a partir de ahí entramos en los meses más secos del año.

Por último, María Encina Álvarez confió en las manifestaciones realizadas hace unos días por la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, quien aseguró que en este momento no se contempla un trasvase a la cuenca del Segura. «Creo que si ella es la máxima autoridad debemos fiarnos de lo que ha manifestado», apostilló.

Por su parte, el presidente de la CHT, José María Macías, confirmó que, a pesar de la ligera mejoría que han experimentado los embalses de la cabecera del Tajo, no hay prevista ninguna reunión de la Comisión Central de Explotación porque no «hemos salido de la situación de excepcionalidad».

Macías anuncia un programa de voluntariado para recuperar las márgenes del Tajo

s.r.n. / toledo

El presidente de la Confederación Hidrográfica del Tajo, José María Macías, anunció ayer la presentación, en próximos días, de un programa de voluntariado ambiental para implicar a la ciudadanía en la recuperación de las márgenes y riberas del río Tajo.

Preguntado por el proyecto comprometido por la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, para recuperar la calidad del agua del Tajo, sobre todo, a su paso por Toledo, Macías pidió a los ciudadanos paciencia porque «la desidia de muchos años» hace difícil resolver el problema en un corto plazo de tiempo.

Explicó que la recuperación del Tajo exige tres pilares básicos. El primero consiste en incrementar la depuración, fundamentalmente, en la Comunidad de Madrid.Para ello, señaló, se ha incrementado un cuarenta por ciento la depuración de la región vecina, poniendo en marcha dos grandes plantas y teniendo en previsión la inauguración de una tercera el próximo otoño. Estas tres nuevas infraestructuras serán capaces de depurar los vertidos de cuatro millones de habitantes.

Asimismo, en CLM, la CHT ha asumido la construcción de 22 nuevas depuradoras que estaban previstas por el Gobierno regional en la provincia de Toledo y otras quince en Guadalajara.

En segundo lugar, Macías insistió en la necesidad de incrementar la actividad en la recuperación de márgenes y riberas del río Tajo, que cuenta ya, recordó, con un programa de acción.

concienciación ciudadana. El tercer gran pilar Macías lo situó en la concienciación ciudadana. «Necesitamos su participación para que nos digan dónde tenemos que actuar», dijo el presidente de la CHT, quien resaltó la experiencia ‘piloto’ vivida hace unos días en Santa Cruz del Retamar (Toledo) donde varias empresas prestaron a sus trabajadores durante dos días para recuperar un tramo del río Alberche.

«Este es un camino y esto no se hace ni un año ni en dos», dijo Macías, quien estimó en más de 3.000 millones de euros el presupuesto necesario para construir las infraestructuras que la Comunidad de Madrid precisa para lograr depurar todo el agua que su población vierte al Tajo.

La ciudad y el condado de Nueva York no existirían si no fuera por los tres trasvases que los abastecen de agua. Igual le pasa a la ciudad y al condado de Los Ángeles.

Estamos hablando sobre las dos ciudades más importantes de los Estados Unidos de América, que no existirían si no fuera por los seis trasvases de aguas que utilizan, ambas ciudades, con caudales siete veces superiores al tristemente derogado trasvase del Ebro. Serían otra cosa. Posiblemente ciudades muy pequeñas y sin la relevancia que tienen hoy, en cuanto a fuentes de prosperidad y oportunidades que son.

A nadie se le escapa que, tanto Nueva York como Los Ángeles, son consideradas como ciudades modernas por excelencia. Ciudades en las que se genera empleo y adonde todo el mundo se desplaza en busca de oportunidades. En busca de una vida mejor. Igual que la Comunidad Valenciana.

Todo esto, sin perder la perspectiva de que el alto valor agrícola y vinícola del Estado de California se debe a los innumerables trasvases de agua que existen esa región.

En efecto, los trasvases de aguas son buenos porqué hacen prosperar a los pueblos. He citado California, Los Ángeles y Nueva York sin carácter exhaustivo. Otras ciudades, como Helsinki, Lesotho, en África, Ben Haroun, en Argelia occidental, ciudades del sertaô brasileño, ciudades de China, India, Pakistán, Irak, Grecia, Francia, Tailandia y un largo etcétera se abastecen de trasvases de aguas tanto para uso en boca como para regadío. Los trasvases son usados en todo el mundo. Son un instrumento de planificación hidrológica utilizado con éxito desde hace siglos y con una contrastada eficacia en la resolución de los déficits hídricos en muy distintos lugares.

Algunos solicitan un potencial trasvase del Ródano. Parece un poco de locos que no podamos tocar el Ebro y que nos tengamos que ir, ¿o sólo los catalanes?, a traer agua del Ródano. ¿No son buenas acaso las desalinizadoras para Cataluña?

A lo mejor, como la palabra Ebro proviene del latín iberus, que a la sazón significa España, no se puede tocar este río, no sea que España salga fortalecida en estos abruptos tiempos que corren para todo aquél que se precie de ser ciudadano de España. A mi juicio, la inmensa mayoría de los ciudadanos de la Comunidad Valenciana y Murcia nos sentimos valencianos y murcianos y, al mismo tiempo y nivel, españoles. En definitiva, las dos caras de una misma moneda. Por eso queremos el trasvase del Ebro: para que la Región de Murcia y la Comunidad Valenciana sigan progresando y que ese progreso lo sea también para España.

Quede claro que no estoy en contra del trasvase del Ródano, antes bien lo contrario. Creo que sería bueno para todos porque vertebraría la Unión Europea, al igual que el Ebro, con su trasvase, debe vertebrar España. En este orden de cosas, desde mi punto de vista, se debería hacer simultáneamente o después de que el trasvase del Ebro sea una realidad desde Tortosa hasta Almería. Nos lo merecemos. Nos lo hemos ganado. Es de justicia. Y, además, ¿cómo le vamos a pedir a Francia un agua que en nuestro propio país no somos capaces de administrar teniendo el Ebro vertiendo 20 trasvases al mar en un año de sequía? No parece de recibo ni de sentido común.

Desde la Fundación, estamos demostrando desde el rigor de la ciencia que ceder o trasvasar agua es como donar sangre. Uno ayuda a los demás y además se ayuda a sí mismo. Su sangre mejora. Con el trasvase del Ebro, igual. La Comunidad Valenciana y Murcia siguen prosperando y España, a la postre, se enriquece y se hace más grande: ganamos todos, en definitiva, y se mantiene uno de los grandes signos de identidad de la fachada sureste de España, que es la agricultura. Gana también España como nación. Quizás sea esto último lo que no les interesa a determinadas personas, grupos o partidos políticos.

Lo tengo -perdón por la autocita- puesto por escrito por algún lado. «Salgamos de la hidroesquizofrenia»: recuperemos el trasvase del Ebro ya.

José Alberto Comos Guillem es director de la Fundación Agua y Progreso de la Comunidad Valenciana.