Agricultura prevé una merma del 30% de la cosecha de cereal en esta campaña

Dice el refrán que, en año bisiesto, la cosecha en un cesto. Lo recordaba ayer el secretario de Asaja Albacete, Jorge Navarro, para referirse a la campaña de cereales de invierno que ya ha empezado a recogerse en la provincia. Según las previsiones de los Servicios Periféricos de Agricultura de la Junta de Comunidades, en los próximos días está previsto que se recolecten 553.534 toneladas de estos cultivos, entre los que se incluye principalmente cebada y trigo. La cifra supone un retroceso de 195.072 toneladas respecto a 2011, cuando se contabilizaron 748.606 toneladas.

Esta caída, de en torno a un 30%, tiene su origen en las malas condiciones climatológicas que han soportado las explotaciones sobre todo durante el invierno, que ha sido muy seco y con ciclos de frío intenso, y las altas temperaturas del pasado mes de mayo, que trajeron consigo el temido ‘asurado’. La cosecha albaceteña, según indicó el representante de Asaja, va a ser «muy floja» en cuanto a volumen y también en calidad, ya que el excesivo calor ha afectado al peso específico del grano.

Según Asaja, las pérdidas podrían alcanzar, en algunas zonas, el 50%, unas estimaciones que también comparte UPA Castilla-La Mancha. El secretario de Organización de esta entidad, el albaceteño Ramón Sáez, dijo que en líneas generales la cosecha de este año va a ser «mala» en Albacete, con descensos de entre el 30 y el 50%.

Plaga de conejos

Sáez indicó que desde UPA ya se había advirtiendo, en los últimos meses, que la cosecha de 2012 iba a ser reducida por la sequía, a lo que se ha sumado el efecto del calor «en plena grana» de la planta. Asimismo, aludió a otro problema que ha centrado la preocupación de las organizaciones agrarias este año: la superpoblación de conejos en ciertas comarcas albaceteñas.

«Se ha perdido mucha cosecha y el rendimiento va a ser bajo», señaló. Solo en la provincia de Albacete y por lo que respecta a la cebada, indicó que la media de los últimos años es de unas 450.000 toneladas, mientras que en la presente campaña no está previsto segar más de 350.000.

Según los datos de los Servicios Periféricos de Agricultura, la superficie media dedicada a cereales de invierno y leguminosas en la provincia ronda las 299.900 hectáreas; en la campaña 2012, esta superficie se ha incrementado un 6,96%. Se contabilizan, en el apartado de cereales de invierno en secano, 225.296 héctareas, mientras que la superficie de cereales de invierno en riego es de 49.535 hectáreas.

En cuanto a las leguminosas y proteaginosas en secano (incluyendo guisante), Agricultura tiene registradas 41.655 hectáreas a nivel provincial, y 4.290 hectáreas por lo que respecta a estos cultivos en riego. En total, está previsto que se recojan 30.000 toneladas de leguminosas en grano, casi 8.000 toneladas menos que en 2011.

Agricultura advirtió que todas estas estimaciones preliminares de cosecha se han calculado sin tener en cuenta los datos a pie de campo y «a expensas de cómo pueda finalizar la maduración en los cultivos de ciclo más largo».

En este sentido, desde Asaja afirmaron que las siembras tempranas están funcionando, «dentro de lo malo», algo mejor, mientras que las realizadas en los primeros meses del año no han granado como debían. Algo similar ha ocurrido con leguminosas y proteaginosas, afectadas por el frío, la falta de precipitaciones y el calor.

En cuanto a Castilla-La Mancha, UPA indicó ayer, en un comunicado, que la actual campaña de cereal será inferior a la de años anteriores en un 30%. La cifra que baraja la entidad es de 2,5 millones de toneladas, menos que en una cosecha «normal». Esta disminución en la recolección «parece ser generalizada en todo el territorio castellano-manchego» aunque, según UPA, «hay variaciones entre comarcas; algunas con un descenso de en torno a un 40 o 50%, mientras que en otras la caída podría ser de entre el 15 y el 20%».

Sequía

En su análisis, la entidad hace especial hincapié en la sequía de este 2012 que, a su juicio, es «la mayor de los últimos años», y teme que sus consecuencias en el sector agrario «se acentúen este verano». En este escenario, UPA ha manifestado su «decepción» por la postura tanto del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente como de la Consejería de Agricultura, a quienes acusa de no comprometerse lo suficiente.

Según UPA, la orden del Ministerio del 26 de mayo sobre acceso a subvenciones para profesionales y la normativa que también publicó la Junta sobre esta materia han resultado ineficaces. Por contra, señala que las Administraciones públicas no han atendido propuestas que, en su opinión, darían mejores resultados, en aspectos como adelanto de ayudas, seguros agrarios, fiscalidad, devolución del Impuesto Especial de Hidrocarburos y ayudas al transporte de forraje.

Pedrisco

En la provincia de Albacete, UPA también ha llamado la atención sobre la necesidad de que se atiendan los llamamientos para respaldar a los profesionales de la comarca de La Manchuela y, más concretamente, de los municipios de Cenizate y Navas de Jorquera, cuyas explotaciones se vieron arrasadas por el pedrisco del pasado 28 de mayo.

Ramón Saéz explicó que tanto las organizaciones agrarias como los ayuntamientos implicados han dado los pasos necesarios para obtener la declaración de ‘zona asimilable a desastre natural’, y recordó que todas las tasaciones de los seguros cifran daños de más del 80%.

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