La Confederación Hidrográfica del Júcar espera terminar la campaña de riegos que arrancó simbólicamente ayer con la apertura de compuertas en la Acequia Real del Júcar sin recurrir prácticamente a los volúmenes almacenados en Alarcón y Contreras, que permanecerían como reserva frente a futuras sequías.
Según fuentes de la Confederación, este objetivo será posible si se producen algunas precipitaciones antes de que acabe la primavera y el verano se mantiene en parámetros meteorológicos «normales», sin demasiados días con vientos secos de Poniente ni temperaturas excesivamente altas.
El objetivo es posible «ahora mismo con los volúmenes de agua retenida en los embalses», dicen las fuentes, si se mantiene una gestión «muy ajustada» de los recursos, gracias al agua acumulada en los embalses de Tous y Bellús y, sobre todo, al elevado caudal circulante en el río Júcar.
Según un aforo realizado ayer, el río Júcar llevaba 15,25 metros cúbicos por segundo en Huerto Mulet y 9,52 m3/segundo en Sueca, lo que permite atender con las denominadas aguas fluyentes una parte significativa de las demandas.
Para el llenado del arrozal, que comenzó hace una semana, la confederación está utilizando los recursos fluyentes y en los próximas días acelerará la liberación de caudales de Bellús, donde se acumulan 28,3 hectómetros cúbicos, y del embalse de Tous, que almacena 200 hectómetros y que obligatoriamente debe quedar semivacío antes de que el otoño traiga de nuevo el riesgo de lluvias torrenciales.
Hiperanuales
Alarcón y Contreras fueron diseñados como embalses hiperanuales, lo que se traduce en la posibilidad de acumular agua durante varios años y servir de garantía frente a eventuales sequías.
La escasez de precipitaciones de los últimos años ha obligado ha realizar una explotación anual de los mismos, dando salida en verano a los escasos caudales acumulados durante el invierno anterior.
En la actualidad, Alarcón acumula 262 hm3 que suponen un 23,45% de su capacidad, mientras que en Contreras hay depositados 224 hm3, que suponen un 26,31%.
Si las expectativas se cumplen, Contreras solo liberaría a diario el caudal ambiental y algunos caudales suplementarios durante el fin de semana para mantener la actividad turística en el río Cabriel.
La gestión de Alarcón estaría condicionada por la necesidad de impedir que los pozos abiertos en La Mancha sequen el río en los tramos más próximos a Albacete, lo que en los últimos años ha sido imposible sin elevar el caudal «ecológico» por encima del volumen de entrada en Alarcón
