La presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores Cospedal, insistió ayer en que no quiere hacer demagogia con el tema del agua, por lo que esperará a que haya un proyecto «más o menos definitivo» para hablar con el líder del PSOE y otras organizaciones. Cospedal respondió a preguntas de los periodistas sobre la petición de reunión que hizo el secretario de los socialistas castellano-manchegos, Emiliano García-Page, para hablar sobre el agua. En su carta a la presidenta, Page destaca la necesidad de que la Región tenga «una sola voz» a la hora de defender sus intereses en los planes de cuenca.