Este año hidrológico está resultando ser mejor que el anterior, pero se sitúa notablemente lejos de la media de los últimos diez años. En los embalses de cabecera de la Cuenca del Tajo, a pesar de las últimas lluvias, la situación sigue siendo crítica y será el Consejo de Ministros quien deba adoptar las decisiones sobre próximos trasvases al Segura.

La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, ha presentado en el la reunión del Consejo de Ministros celebrada hoy un informe sobre las últimas incidencias hidrológicas del año en curso. De este informe se puede concluir que el año hidrológico actual, en conjunto, es mejor que el anterior, pero se sitúa notablemente lejos de la media de los últimos diez años.

Por zonas, existe un déficit acumulado de precipitaciones en el periodo 2004-2007 en la cabecera del Tajo, cuencas del Júcar y Segura y cabecera del Guadalquivir, así como en las cuencas intracomunitarias de Andalucía y Cataluña.

En Entrepeñas-Buendía, a pesar de las últimas lluvias y de la leve mejoría en la cabecera del Tajo, la situación sigue siendo crítica porque se encuentran aún muy lejos de la media de los 10 últimos años (se adjunta gráfico de la evolución de la situación). Persiste la situación de excepcionalidad para trasvasar agua a la cuenca del Segura, por lo que el Consejo de Ministros seguirá adoptando las decisiones pertinentes en base a la evolución de la situación.

En la Cuenca del Segura existe una leve mejoría respecto al año hidrológico anterior, pero la situación sigue siendo crítica y solamente se podrá abastecer al 50 por ciento de los regadíos. Igualmente sucede con la Cuenca del Júcar, donde con una situación crítica similar al año hidrológico anterior sólo se podrá abastecer el 40 por ciento de los regadíos. En la Cuenca del Guadalquivir, donde la situación es incluso peor que en el año hidrológico anterior, sólo se podrá dotar de agua al 35 por ciento de los regadíos.

Al margen de estos datos sobre regadíos, el informe viene a confirmar que se ha garantizado el abastecimiento a la población, a pesar de que se trata de la sequía más importante desde que se tienen registros fiables (en la sequía de los 90, las restricciones afectaron a 12 millones de personas). La ministra de Medio Ambiente ha informado también sobre las inundaciones producidas en Galicia en noviembre de 2006, en Extremadura y Canarias en enero-febrero de 2007 y en Aragón y Navarra en abril de 2007.