La cuestión de los recursos hídricos fue protagonista del Día de la Región a través de intervenciones como la del presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, y las declaraciones de los componentes de la Mesa del Agua, galardonada con una de las Medallas de Oro.

Barreda abogó por «defender todos juntos» los recursos con que cuenta la Región y afirmó que «si no hubiera diferencias políticas en estos asuntos, como ocurre en otras regiones, Castilla-La Mancha obtendría sus reivindicaciones con más facilidad».

El presidente autonómico, que tuvo palabras para otra de las entidades galardonadas este año en materia de agua, la Junta Central de Regantes de la Mancha Central, por su «modelo de autogestión sostenible», recordó que, tradicionalmente, en Castilla-La Mancha «en cada una de las cuencas se pasaba de nosotros y se pensaba en otros intereses», una circunstancia que está «cambiando» pero en la que hay que seguir trabajando.

«Los ríos de España son de todos los españoles pero también de los castellano-manchegos», comentó en este sentido, y señaló: «Yo no soy partidario, como se me acusa, de blindar ningún río, pero hasta ahora nosotros hemos estado al margen y los beneficios se han ido a otros lugares».

Otras opiniones

Integrantes de la Mesa del Agua como las organizaciones agrarias Asaja, Upa y Coag-Ir, Cooperativas Agro-Alimentarias o el CREA también se pronunciaron sobre esta cuestión.

Así, el secretario general de Asaja Castilla-La Mancha, José María Fresneda, fue tajante al afirmar que «ya está sobrando ese trasvase que pasa por Castilla-La Mancha». Por su parte, Julián Morcillo, secretario regional de UPA, dijo que «debemos seguir luchando por las necesidades de todos los castellano-manchegos y los agricultores y ganaderos de la Región», mientras que José María Oñate, responsable de la sectorial de Agua de Coag-Ir de Castilla-La Mancha, afirmó que los profesionales del campo «necesitan el agua para hacer rentables sus explotaciones».

José María Tarjuelo, director del CREA, señaló que el premio a la Mesa del Agua, que recogió en nombre de todos sus integrantes, se debe a la «evolución y preocupación de todos los castellano-manchegos por disponer de agua, hacer un uso racional de ella y mantener la colaboración con el resto de españoles a la hora de compartir» estos recursos.

Los representantes de las organizaciones agrarias presentes en la Mesa del Agua han destacado que la Medalla de Oro que hoy han recibido les da «ánimos» y «fuerzas» para seguir defendiendo los intereses de la región y, muy especialmente, «de los agricultores castellanomanchegos».

Así se han pronunciado, en declaraciones a los medios tras el acto institucional que este mediodía se ha celebrado en el Palacio de Congresos de Albacete, el secretario regional de ASAJA, José María Fresneda; el responsable regional de UPA, Julián Morcillo; el presidente de la Unión de Cooperativas Agroalimentarias de la región, Ángel Villafranca; y el responsable comisión sectorial del agua de COAG-IR, José María Oñate.

José María Fresneda ha insistido en que «a todos nos tiene que unir un único mensaje, que no tenemos por qué ser menos que ningún otro territorio de España».

Y, en relación con la defensa del agua, ha pedido que «en esta unidad que existe en este momento en torno a un objetivo común se olviden todos de los matices, porque esto no tiene matices, formulaciones, textos alternativos».

«Esto solamente tiene un único mensaje; ya está sobrando ese trasvase de agua que pasa por Castilla-La Mancha», ha sentenciado.

Por su parte, Julián Morcillo ha destacado su compromiso de seguir luchando por el agua, tan necesaria «para las necesidades de los agricultores de la región».

Ángel Villafranca ha opinado que «hay que seguir trabajando con ilusión y ponerle al mal tiempo buena cara» y ha subrayado que, habituados a «una crisis muy endémica» en el campo, ahora que la crisis se ha extendido al resto de la sociedad, los agricultores han de ser «un ejemplo de la lucha».

Lucha en la que también cree José María Oñate, quien ha advertido de que Coag no cejará en el intento de que Castilla-La Mancha tenga éxito en sus reivindicaciones y ha añadido: «al final, vamos a ganar la batalla del agua, con toda seguridad». EFE 1010289

No es un brindis al sol, ni tampoco un gesto político para cubrir el expediente. El Gobierno de Extremadura va en serio con el estudio que ha encargado sobre «un hipotético» trasvase desde el embalse de Valdecañas, en Cáceres, al Levante. Detrás de ese estudio se encuentra el Ministerio de Medio Ambiente, que lo apoya y alienta desde un plano no visible, como complemento al acueducto Tajo-Segura. Quien se pronuncia en contra es la Comunidad de Regantes de Valdecañas, cuyos miembros están dispuestos a tomar medidas para que este proyecto trasvasista no se apruebe, según declara a La Verdad su presidente, Primitivo Gómez.

La adjudicación de los estudios coincide con la aprobación de una urbanización de lujo en un islote del pantano de Valdecañas. El Gobierno de Extremadura quiere saber si hay sobrantes de agua, antes de apoyar o rechazar ese trasvase, explicó un portavoz.

Este embalse, a mitad de camino entre Madrid y la frontera portuguesa, almacena estos días 1.400 hectómetros cúbicos y está al 90% de su capacidad total, lo cual demuestra a ojos del Ministerio y del Gobierno murciano que cuenta con excedentes para derivar a Ciudad Real primero y después a la cuenca del Segura.

Pero los regantes de la zona no están de acuerdo. Su comunidad la integran 800 comuneros que tienen asignado un volumen anual de 29 hectómetros de Valdecañas para atender 6.000 hectáreas de regadíos. La pequeñez de este volumen en comparación con los 1.400 hectómetros de reserva en dicho pantano no es obstáculo para que Primitivo Gómez recalque que no sobra el agua. Matiza que en esa zona queda una parte de regadíos por crear. Aunque fuera el doble de superficie, no obstante, seguiría habiendo más de mil hectómetros de sobrantes.

«Ese trasvase no lo vemos viable. No hay excedentes. La media de agua almacenada en agosto es de 680 hectómetros. Por ahí se habla de trasvasar 600, con lo cual…». Son las cuentas, imprecisas, que hace esta comunidad de regantes. Sus previsiones y temores tampoco coinciden con las cifras que se barajan de entre 200 y 500 hectómetros máximos a lo largo de todo el año, y no en agosto.

Primitivo Gómez indica a renglón seguido que aún no hay nada sobre la mesa. «Hay muchos globos sonda y hemos llamado a la Confederación Hidrográfica del Tajo para expresar nuestro malestar y que nos aclare la situación». Añade que el agua de Valdecañas es de mala calidad porque recoge los residuos de Madrid, por lo que una extracción acentuaría ese estado. Advierte de que van a tomar medidas ante la posibilidad de que el estudio que se ha encargado sea favorable al trasvase. Opina que hay otras regiones, como Castilla-La Mancha y Madrid que también deben ser consultadas.

A su juicio, el Trasvase del Ebro no tenía que haber sido derogado. «Al menos, se tenían que haber calculado mejor las medidas alternativas. El Gobierno ha actuado a ciegas». Primitivo Gómez recuerda que la cuenca del Segura cuenta con desaladoras, aunque desconoce los resultados que están ofreciendo. Por principio, su comunidad rechaza los trasvases.

«Nuestros regadíos se montaron como compensación al Trasvase Tajo-Segura. Su desarrollo aún no ha acabado». Alude a la situación de la cabecera del Tajo. «La Alcarria, de donde parte del Tajo-Segura, sigue siendo una de las zonas más deprimidas de España. Si se queda sin agua, se corta el desarrollo».

Un portavoz del Gobierno de Extremadura resalta el criterio de su presidente, el socialista Guillermo Fernández Vara, «de hablar de todo». «A eso no nos negamos nunca. Los ríos no se pueden trocear. Hemos encargado los estudios porque, en el caso de que algún día se plantee un trasvase desde Extremadura, queremos tener un conocimiento previo de la situación para no ir a ciegas», explica.

Recuerda de dichos informes no conllevan ninguna toma de decisión. «Servirán para fundamentar nuestro apoyo o rechazo a ese trasvase, ya que primero deben quedar aseguradas nuestras necesidades para los próximos 50 años. Hoy puede haber excedentes, pero mañana no. Es un asunto delicado y queremos tener la mayor certeza», añade.

El Diario Oficial de Extremadura adjudicó el pasado día 19 los estudios sobre este hipotético trasvase a dos empresas de ingeniería, que ofrecerán sus resultados en nueve meses.

Al igual que existe la Tubería Manchega, como insiste en llamar el Gobierno de José María Barreda al trasvase Tajo-Guadiana, puede construirse otra tubería desde el otro extremo de la cuenca, mucho más abundante en recursos hídricos, opinan fuentes del Ministerio de Medio Ambiente.

Ecologistas en Acción le acaba de abrir un nuevo frente al Júcar y al Tajo-Segura en Bruselas y, además, ha introducido en su reclamación un asunto, literalmente, capital para todos los usuarios: los precios del agua.
Esta reclamación ante la Comisión Europea se une a las que ya están presentadas por otras organizaciones, como WWF-Adena, contra la manera de aplicar la Directiva Marco del Agua en España y que han motivado la apertura de un expediente de infracción contra nuestro país.
Desde Ecologistas en Acción de Albacete se señalaba que nuestra provincia, precisamente, encarna muchos de los problemas que se describen en la denuncia de la organización ante las autoridades comunitarias y uno de sus integrantes, Cipriano Escribano, repasó para La Tribuna de Albacete el texto de la reclamación ante la CE.
La queja, admitida a trámite la semana pasada, se basa en el incumplimiento, por parte de España, de los preceptos de la DMA (Directiva 2000/60/CE) en tres aspectos: el enorme retraso que acumula la revisión de los planes hidrológico de cuenca, la ausencia de una política tarifaria que asegure la recuperación de los costes del agua, y las carencias del proceso de revisión, en lo tocante a la participación pública.
En el primer punto, Albacete tiene una implicación directa. Recordar que, cuando se publicó la DMA, se estableció que los planes de cuenca debían estar publicados «a más tardar» nueve años después de su entrada en vigor, esto es, en 2009.
El problema es que, en octubre de 2004, el Supremo ordenó la exclusión de las cuencas internas de la Comunidad Valenciana del ámbito de la futura Demarcación del Júcar, a resultas de una demanda interpuesta por la Fundación para el Progreso de Albacete.
Desde entonces, ni el Gobierno central, ni la Confederación del Júcar (CHJ) han sido capaces de lograr un acuerdo sobre el ámbito territorial de la Demarcación. Y, por eso, Ecologistas en Acción afirma que el retraso de «mayor gravedad» es, precisamente, el que lleva encima el Júcar.
«El Esquema Provisional de Temas Importantes inició su consulta el 18 de diciembre de 2009», afirma la reclamación admitida a trámite por la Comisión. Los ecologistas también subrayan que lo que debía estar listo no era ese esquema, sino el plan «antes del 31 de diciembre de 2009». Pero la auténtica carga de profundidad viene a continuación, y en relación a una obra polémica para todo Albacete y, en general, para toda Castilla-La Mancha:el trasvase Tajo-Segura. «Probablemente, la tarifa más cara de aguas para riego que se paga en España sea la que pagan los usuarios del trasvase Tajo-Segura», afirmaba ayer Escribano, «pero es de sólo 12 céntimos de euro el metro cúbico, cuando el agua para consumo humano se cobra a partir de un euro». Esta situación provoca, a juicio de los ecologistas, una discriminación de los usuarios de abastecimiento en beneficio de los de regadío. Ya que, según la organización, a los primeros no se les perdona ni una, mientras que los segundos cuentan con una política tarifaria mucho más favorable.
«El usuario de abastecimiento paga el 100% de los costes a través del precio del agua y, vía impuestos, paga religiosamente todas y cada una de las obras hidráulicas, sean para consumo humano o sean para riego», destacó Escribano, «pero eso no pasa con los regantes». Así, el usuario de abastecimiento paga las depuradoras, las traídas de aguas superficiales o las plantas de ósmosis. Y, de una forma u otra, también paga, por poner ejemplos, todas las obras que se han hecho sobre o en torno al trasvase desde que se creó.    

Las tormentas de finales de la semana pasada en las comarcas del interior de la provincia de Valencia y en Teruel han vuelto a provocar que la mayor presa de la cuenca del río Turia, la de Benagéber, vuelva a desbordarse, según los datos de la Confederación Hidrográfica del Júcar.

Prácticamente desde mitad de enero hasta la primera quincena de mayo el mencionado pantano ha estado soltando agua porque las escorrentías y las aportaciones del Turia superaban su capacidad de embalse. Durante todos estos meses el agua que escapaba de las compuertas de Benagéber ha servido para renovar la Albufera, recargar acuíferos y ofrecer la imagen, nunca vista antes y durante tanto tiempo, del río con agua.

Ahora la capacidad de Benagéber vuelve a verse superada. Disponía ayer de 221,48 hectómetros cuando su máximo nivel de embalse es de 221,3 hectómetros.

Las dos grandes presas de la Confederación Hidrográfica, Alarcón y Contreras, siguen recargándose, a pesar de que el segundo está sirviendo agua para los arrozales del marjal de la Albufera. Alarcón dispone de casi cinco hectómetros más que la semana pasada. Embalsa 569,62 hectómetros y supera el 50% de su capacidad. Contreras ha recargado casi dos hectómetros sobre la última medición, está a más del 52% y almacena 444,75 hectómetros. Si a estos dos se les une Tous se concluye que el sistema del Júcar dispone de un 53,4% de su capacidad.

En conjunto, los pantanos de la CHJ presentan un saldo positivo de 6,73 hectómetros, están al 56,69% y disponen de 1.897,17 hectómetros cúbicos, 622 más que hace un año.

Miles de personas, 2.000, según la Policía, se manifestaron ayer en Barcelona para reclamar un caudal ecológico en el tramo final del Ebro y protestar contra el trasvase «camuflado» que, a su juicio, pone en peligro el futuro del Delta. Los organizadores se refirieron concretamente a los envíos previstos a través de los canales Segarra-Garrigues y Xerta-Sénia, que dejaría el agua en la frontera con Castelló.
La marcha, convocada por la Plataforma en Defensa del Ebro (PDE) bajo el lema «El Ebro sin caudales es la muerte del Delta», reclamó a la Comisión Europea que intervenga en el Plan Hidrológico del Ebro y exigió al Gobierno que cumpla las directivas ambientales sobre agua.
La reinvindicación de la PDE tiene ciertas implicaciones en la Comunitat Valenciana. Según indicó a este diario Manuel Tomàs, portavoz del colectivo: «El trasvase a Levante sigue vigente a través del canal Xera-Sénia; lo que decimos es que siguen especulando con el agua». En cuanto a los fines, señala Tomàs: «Los regadíos son la excusa. Hoy por hoy es poco moderno hablar de transferencias de agua para proyectos urbanísticos». Los antitrasvasistas sostienen que esos envíos de agua «camuflados» para regadíos se dedicarán a fines urbanísticos cuando se vea que «no son viables económicamente».
De momento, el borrador del plan hidrológico del Ebro habla de unas expectativas potenciales de creación de más de 400.000 hectáreas de nuevos regadíos y un incremento de la capacidad de regulación de la cuenca en unos 2.022 hectómetros cúbicos al año, lo que duplicaría las cantidades del derogado trasvase. En este contexto, los antitrasvasistas se echaron ayer a las calles de Barcelona «para pedir que la Comisión Europea tutele el plan de cuenca del Ebro e investigue si los dos canales son de regadío o esconden otras intenciones», explicó Manolo Tomàs.

El presidente de la Junta Central de Regantes de la Mancha Oriental (JCRMO), Francisco Belmonte, ha agradecido a la Junta de Comunidades la Placa al Mérito Regional que les ha otorgado pero cree que «sobran reconocimientos y actos y faltan hechos».

«Yo preferiría que, en vez de darme la placa, mi Gobierno regional me diera otros apoyos que estamos solicitando y de los que, de momento, no estamos teniendo contestación», se sinceró Belmonte en una entrevista con Efe con motivo de la entrega de distinciones en el Día de la Región.

Belmonte explicó que hace dos meses se reunió con el presidente de la Junta, José María Barreda, para plantearle «lo que para mí es parte de la solución de los problemas del mundo rural en general, ya no sólo de los regantes».

Apuntó que se refiere a que de la riqueza que generan las energías renovables «se beneficie el mundo rural» y no que «se la regalemos a grandes empresas que, además, pagan los impuestos fuera de la región y a media docenita de empresarios locales afines».

Lamentó que todavía está «esperando» una respuesta y añade que «el presidente me dijo que nos reuniríamos y hasta ahora», por lo que afirmó contundente que «entonces, yo cambio la placa por eso y con muchísimo gusto, además».

Consideró que, con las producciones de energías renovables, «los ayuntamientos, con deficiencias enormes actuales, también podrían tener unos fondos importantísimos, podrían mejorar los servicios de los pueblos y la gente no se iría de ellos, porque en los pueblos, con buenos servicios, se vive mejor que en la ciudad».

Destacó que, a la hora de abordar estas medidas que proponen, «los políticos tendrán que demostrar que les preocupamos y que les importamos».

Cuestionado qué esperaba del proceso del Plan de Revisión del Júcar, que es uno de los temas que más preocupan a los regantes y usuarios asociados en la JCRMO, Belmonte lamentó que «ya no esperamos nada, ya sé desde hace tiempo que no iba a haber plan hidrológico en esta legislatura; hace poco ya me lo confirmaron».

Reconoció que «cuando me enteré estuve a punto de marcharme, porque yo volví para eso, para revisar el Plan Hidrológico del 97, porque yo participé en su redacción y parecía lógico que los mismos que lo hicimos lo revisáramos».

Añadió que, sin embargo, «resulta que he vuelto para revisar el plan y no hay plan, aunque seguimos manteniendo reuniones», y asegura que «yo ya le he dicho al presidente que a más reuniones de “paripés” no voy».

Se mostró tajante al afirmar que «cuando haya un borrador de Plan Hidrológico encima de la mesa me sentaré a negociarlo y a discutirlo, como hice en el 95 y en el 96, que aquello no fue cosa de un día, tardamos dos años en llegar a un acuerdo, pero es que ahora no hay nada».

Belmonte criticó que «no hay Plan Hidrológico y, es más, ante la debilidad del Gobierno central, Valencia y Murcia se han envalentonado y están mucho peor que estaban en el 94/95».

Añadió que «en España, afortunadamente, tenemos una legislación de aguas bastante completa y se trata de respetar la ley de aguas y la constitución cuando se refiera al asunto, y las sentencias de los tribunales».

Por eso, recordó que «cuando me preguntaron cómo quería que fuera el Plan del Júcar solamente dije: “a ser posible legal”, tampoco pedíamos tanto».

Y destacó que la revisión se traduce simplemente en que «se trata de juntar a las comunidades implicadas delante del Gobierno central y decir: “esto es lo que hay que hacer y hay que hacerlo legalmente”, no hay más».

Denunció que esto no está siendo posible porque «en el tema del agua nos hemos dedicado a hacer demagogia, partidismo y ruido pero no le buscamos soluciones lógicas, sensatas y legales».

Sobre el elevado precio de las tarifas eléctricas, Belmonte explicó que «el problema ya no está tanto en la subida de las tarifas, porque yo estoy dispuesto a pagar el kilowatio como todo el mundo, pero es abusivo que nos obliguen a contratar todo el año una cuota de potencia que sabemos que no vamos a utilizar doce meses, sino entre 3 y 5 meses».

«Se trata de una cuota de potencia que ha subido un 480 por ciento en año y medio y ese sí es el atraco que hacen las eléctricas a los regantes, pero que la pistola y el horario se lo da el Gobierno», sentenció.

El salón de actos de la Cooperativa del Campo La Unión, de Tarazona de la Mancha, ha sido escenario de celebración de la Jornada de Presentación del Proyecto Cooperación en Desarrollo Rural Eneral (Energías Renovables en el Medio Rural para la Lucha contra el Cambio Climático).

El acto, estaba organizado por La Asociación para el Desarrollo Integral Mancha Júcar-Centro, que junto a otros 6 territorios rurales, es beneficiaria de la subvención otorgada por el Ministerio de Medio Ambiente, y Medio Rural, y Medio Marino por la que se financian proyectos de cooperación interterritorial de desarrollo rural en el marco de la Red Rural Nacional y de los diferentes Programas de Desarrollo Rural.

El presidente de ADI Mancha Júcar-Centro, Justiniano Muñoz, destacó la importancia que tiene el desarrollo del entorno rural, y puso en valor el trabajo que los grupos de desarrollo rural llevan a cabo en sus territorios a través de las distintas medidas y líneas de subvención.

Según estas fuentes, el proyecto Eneral, cuenta con un presupuesto de 738.000 euros para su desarrollo, y participan en su desarrollo grupos de Albacete, Valencia y Cuenca.

El potencial de la biomasa, fue destacado por Muñoz, que abogó por ahondar en la investigación de los cultivos agroenergéticos.

Después de agradecer a los asistentes su presencia en el acto, les pidió que difundieran este importante proyecto, y concluyó afirmando que los grupos de desarrollo rural deben de ayudar al entorno rural para que en el futuro sea un entorno razonable y real.

Por su parte, el delegado provincial de Agricultura y Desarrollo Rural, Antonio Mompó, aseguró que esta Región y, principalmente la provincia de Albacete habían sabido ser líderes en energías renovables, y afirmó que ahora nos encontrábamos ante el reto de aprovechar la energía en el medio rural, y en este caso a través de la biomasa.

15.000 empleos en la Región

En este contexto, indicó que la biomasa tendrá una importante repercusión en la provincia y en la región, incluso mayor que la energía fotovoltaica, creando una riqueza que se distribuirá por todo el territorio.

Mompó reveló que será una oportunidad para muchos trabajadores del medio rural, en el que se estima que se generarán cerca de 15.000 puestos de trabajo en la región.

A continuación se llevó a cabo el acto de presentación de las acciones a desarrollar dentro del Proyecto Eneral, por parte de Carlos Canet, de la empresa Imedes.

La jornada se cerró con la ponencia que desarrolló Luis Puchades, ingeniero agrónomo experto en biomasa, sobre ‘Oportunidades para el medio rural del aprovechamiento de la biomasa’.

Eneral es un proyecto de cooperación interterritorial liderado por el Grupo de Desarrollo Rural Portmader y subvencionado por el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino. El proyecto arrancó en 2009 con la definición de los objetivos, acciones y metodología a emplear y se desarrollará durante los años 2010 y 2011.

El territorio Eneral comprende un total de 198 municipios distribuidos entre las provincias de Castellón y Valencia en la Comunidad Valenciana, y Albacete y Cuenca en Castilla la Mancha. El proyecto aprovechará la cooperación entre territorios para definir una estrategia común de lucha contra el cambio climático a través de las energías renovables.

Eneral incidirá en el estudio del potencial real de los territorios participantes para la producción de energía a partir de biomasa y así motivar posibles iniciativas que estimulen la economía local a la vez que contribuyan a la lucha contra el cambio climático y el despoblamiento rural.

La Ribera sacó ayer a la calle a varios miles de personas en Sueca para exigir a los políticos que dejen las disputas y la demagogia en torno al agua y redacten un plan de cuenca que ponga fin a la degradación del Júcar. El mensaje iba dirigido tanto a la Generalitat como al Ministerio de Medio Ambiente, pues el plan de cuenca en vigor, de 1998, repartió más agua de la que ha llevado el río en los últimos 25 años.

Xúquer Viu, precursora de la protesta, no estuvo sola. Un total de 24 ayuntamientos, gobernados por partidos de distinto signo político, se manifestaron en defensa del río. El PP dio libertad a sus militantes para asistir. Los concejales de Algemesí Antonio Saá y Gabriel Palop, del PP, estuvieron allí. «Venimos porque estamos al 80% de acuerdo con los postulados de Xúquer Viu», dijo Saá, que, sin embargo, se mostró a favor de los trasvases. Otras 104 organizaciones se adhirieron a una marcha en la que se exigió a los políticos un giro en sus políticas hídricas.

«Ha aumentado el apoyo social y político respecto a la manifestación de hace cinco años», resumió a modo de balance el portavoz de Xúquer Viu, Paco Sanz. La Mesa pel Xúquer abrió la manifestación, que estuvo amenizada por la batucada de El Cabanyal, la Nova Muixeranga de Algemesí y la de Sueca. Un concierto protagonizado por cantautores y músicos de la comarca cerró esta jornada reivindicativa.

Los organizadores de la protesta de ayer dejaron patente su preocupación por el retraso en la elaboración del plan de cuenca del Júcar. Hace dos escasos meses, Xúquer Viu, arropado por asociaciones ecologistas, denunciaba el peligro de sobreexplotación que planea sobre cerca de 19 masas de agua en la demarcación del Júcar, entre ellas los acuíferos de la Mancha Oriental, los del Vinalopó, el de Villena-Beneixama o el de La Plana-Vinaròs. Entonces y ayer volvieron a criticar a los políticos por hacer demagogia en torno al problema del agua en lugar de cumplir con la Directiva Marco, del año 2000. La nueva planificación está paralizada porque no se han definido geográficamente las demarcaciones territoriales.

Los defensores del río exigieron que el agua del trasvase Júcar-Vinalopó -que estará en pruebas en otoño- sirva para mantener las explotaciones agrícolas y no para los macroproyectos urbanísticos levantados en el sur. La Ribera quiere que se garantice además el abastecimiento a la comarca de agua sin nitratos, y reivindica un caudal ecológico para el Júcar y sus afluentes, sin el que no se puede garantizar la salud de espacios naturales como L’Albufera.

La manifestación de ayer en Sueca no fue la única en defensa de un río que se celebra este fin de semana en España. En total, y según la ONG WWF, más de 200 organizaciones ambientales y sociales de ámbito nacional y autonómico apoyan estas acciones.

‘El riu és nostre i el volem viu’. Ésta es una de las consignas de la manifestación por el Júcar que tendrá lugar mañana en Sueca. Y es que una vez más la Ribera se unirá por su río.

En esta ocasión, se han adherido a la concentración 21 ayuntamientos de los aproximadamente cincuenta de los que se componen la Ribera Alta y la Baixa. Menos de la mitad de los municipios harán frente común por el Júcar pero todos por el mismo fin, conseguir mejoras sustanciales para el río que forma parte de la vida de estos municipios.

Pese a tratarse de una concentración que pedirá a las administraciones, tanto autonómica como estatal, que se garantice el abastecimiento de la Ribera con agua calidad y sin nitratos, entre otras reclamaciones, es relevante que las localidades que no se han adherido son del mismo color político. Por esto destaca que sólo dos de los que apoyan la iniciativa están gobernados por el Partido Popular, el de Alzira y Corbera.

Sin embargo, el PP de la Ribera ha manifestado que ha dado libertad a sus cargos y afiliados para acudir al encuentro de Sueca ya que «casi todos los postulados de Xúquer Viu son compartidos por la formación».

Es significativo que el Ayuntamiento de Alzira se haya unido a esta reivindicación organizada por Xúquer Viu. E incluso su alcaldesa, Elena Bastidas, ha firmado el manifiesto de esta concentración que se celebrará a partir de las seis de la tarde desde el Ayuntamiento de Sueca. Pese al apoyo del Consistorio alcireño, Bastidas ya ha avisado que, por motivos de agenda, no podrá acudir a la manifestación.

Además de los 21 municipios han apoyado esta manifestación 89 organizaciones de todo tipo. Sindicatos, organizaciones ecologistas, culturales, deportivas y partidos políticos tanto de la Ribera como de toda la provincia se hacen eco de las reivindicaciones que mañana llenarán la ciudad de Sueca.

Acabar con la sobreexplotación del acuífero de la Mancha Oriental, la elaboración de un nuevo Plan de Cuenca donde se determine el caudal ecológico del río, que se cumpla el Plan de Recuperación del Júcar que se aprobó en 2008, la defensa de los regadíos tradicionales y de una agricultura sostenible y que los 100.000 vecinos de la Ribera puedan beber agua de calidad y sin concentraciones de nitratos son las peticiones que se reivindicarán en esta manifestación.

También se luchará porque el agua transferida del Júcar al Vinalopó no se destine a la especulación urbanística y se respete el acuerdo con la Unión Europea por el que se determinaba que este agua se utilizaría exclusivamente para usos agrícolas y de recuperación de los acuíferos.

El trasvase Júcar-Vinalopó ya fue el tema central de la manifestación que Xúquer Viu realizó en 2005 y que consiguió que el rumbo de esta infraestructura cambiará y de esta forma mejorar el futuro del río. En esa ocasión, unas 5.000 personas se reunieron también en Sueca y solicitaron al Gobierno que frenara las obras para que la toma del trasvase no saliera de Cortes de Pallás, zona alta del río, como estaba proyectado sino desde el Azud de la Marquesa.

Con motivo de la manifestación de mañana en Sueca, algunos partidos políticos de la comarca han querido sumarse también solicitando las reivindicaciones del acto por el Júcar ante el Ministerio de Medio Ambiente y la Conselleria. Este es el caso del Bloc de Alzira que, gracias a la abstención de los ediles del PP, se ha conseguido aprobar una moción a favor de estos postulados.

Por su parte, el Partido Popular de Alzira ha presentado otra moción en materia hídrica solicitando al presidente del Gobierno que asegure la defensa y tutela de los usuarios del Júcar y el mantenimiento de los caudales necesarios.

Música por el Júcar

Xúquer Viu espera que todos los ciudadanos de las Riberas se unan para defender el río. Y es que esta organización quiere concienciar a todos de que pese a los avances conseguidos en los últimos años y las abundantes lluvias de este año no hay que olvidar que todavía queda mucho por hacer.

Hace cinco años se consiguió desactivar la amenaza inminente que suponía el trasvase desde Cortes de Pallás, ahora las necesidades aunque menos visibles siguen siendo cruciales para este territorio.

Además tras la manifestación y la lectura del manifiesto, Sueca acogerá un concierto de cantantes y canciones de la Ribera. Junto al parque de la Estación de la capital de la Ribera Baixa Dani Miquel, Josep Dídac, Òscar Briz, entre otros cantarán por el Júcar.

El río que baña las dos comarcas y que les da su nombre será el protagonista de este acto en el que se espera que, al igual que hace cinco años, las administraciones oigan a los ciudadanos y se respete las necesidades de un Júcar que tanto ha dado a sus municipios. Pero también que sus vecinos acudan a esta manifestación de Sueca.