«Valencia tiene la idea de que el Júcar es suyo, con derecho a usar y abusar»

El presidente de la JCRMO reclama que, en pleno proceso de revisión del plan de cuenca, se cumpla lo que aún hay pendiente

29.07.12 – 01:52 –

LYDIA TORREGROSA albacete.lv@laverdad.es | ALBACETE.

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«Aquí, con 110.000 hectáreas, estamos gastando lo mismo que ellos en 20.000»

«El Gobierno regional, que me tenía preocupado, está poniéndose las pilas»

«Lo del recibo de la luz es un escándalo, este país está dominado por las eléctricas»

«Han bajado los robos, pero es que cogen a los autores y se van de rositas»

El tema del agua, tan controvertido en tiempos, parece haber sido arrastrado por el aluvión económico. Sin embargo, las alarmas por la sequía han vuelto a saltar este verano en el campo albaceteño, y hablar de los recursos existentes implica hablar de gestión y de planificación. Francisco Belmonte, presidente de la Junta Central de Regantes de la Mancha Oriental (JCRMO), afirma que los regantes de la provincia han hecho bien los deberes, pero echa en falta un cumplimiento estricto de la ley para resolver lo que está pendiente del plan del Júcar, como la sustitución de bombeos para que la provincia pueda tomar toda el agua superficial del río que le corresponde.

-Empezamos el año hablando de sequía y este verano vuelve a ser un asunto que preocupa al campo…

-Este es ya el segundo año de sequía que llevamos, y espero que haya un tercero atendiendo a los ciclos que conocemos. Es algo que no debe sorprendernos, porque las sequías y las lluvias son cíclicas y no hay otra; tenemos que convivir con ello.

-¿Se notan ya los efectos?

-Se está gastando más agua, los pantanos descienden y, aunque menos porque es enorme, también se nota en el acuífero. Llevamos años insistiendo en que hay que hacer una buena gestión, sobre todo en los años húmedos.

-Señala que se está gastando más agua. ¿Puede concretar cuánto?

-Aún es pronto, porque puede que en estas semanas se produzcan precipitaciones que eviten riegos.

-¿Cómo está el acuífero?

-Normal. Con los años de abundancia conseguimos recuperarlo y disponemos de esos recursos.

-¿Siguen pesando sobre los regantes albaceteños las acusaciones de los valencianos sobre el uso del agua?

-No voy a entrar más en discusiones regionales. Hace poco se lo explicaba a alguien de la Confederación, y es que Valencia tiene la idea de que el Júcar es suyo, aunque el río ni siquiera pase por la capital. El 72% de la cuenca está en Albacete y Cuenca; ellos solo tienen el 28%, y aún así siguen pensando que es de su propiedad con derecho a usar, disfrutar y abusar. Poco a poco habrá que ir cambiándoles la mentalidad, haciéndoles ver que el Júcar es de todos. Valencia se ha estado aprovechando de un agua que a veces no le correspondía a través de trasvases. Un ejemplo es el abastecimiento a Valencia; estamos peleando para que tomen lo que les corresponde del Turia, que es el río que pasa por allí, y no del Júcar.

-¿Cabe algo de autocrítica? ¿En Albacete se han hecho bien las cosas desde el principio?

-Si los demás regaran como nosotros, con la misma eficiencia, al Júcar se le saldría el agua por las orejas. Aquí, con 110.000 hectáreas, estamos gastando los mismos recursos que ellos en 20.000. Lo digo muchas veces: en el Júcar hay agua para todos, incluso para los que no son del Júcar. Yo no me opongo al abastecimiento de Valencia, pero la realidad es que es un trasvase: démosle el tratamiento legal que hay que darle.

-Pese a todo, la JCRMO ha tenido buena relación con el anterior presidente de la CHJ, Juan José Moragues.

-Nosotros, como norma, siempre hemos tenido buena relación con todos los presidentes; hemos conseguido hacerlos a todos buenos, porque no hay más remedio. Hay que llevarse bien y, hasta cierto punto, hemos sido muy comprensivos. Yo le aprecio mucho (a Juan José Moragues), pero cuando hicieron la balsa en Villena para el trasvase al Vinalopó, y la llenaron de prueba con 10 hectómetros cúbicos del Júcar, le advertí que si al final se firmaba el envío le demandaba, y eso no quita para que le siga apreciando mucho.

Ampliación

-¿Qué tal con la nueva responsable, María Ángeles Ureña?

-De visita todos somos simpáticos y agradables. Imagino que ella querrá hacerlo bien, pero son muchas las presiones. En Valencia les echan el aliento en el cogote cuatro ‘ultras’, porque luego, entre regantes, nos entendemos mejor. Al final, en el Júcar, nos llevaremos bien todos y tendremos agua suficiente. Eso sí, siendo nosotros los más humildes, porque aquí no hablamos de ampliación de regadíos, cosa que podríamos plantearnos. Ahora, con la revisión del plan de cuenca, habrá que ver cómo se compensan las aguas que deberían haber sido superficiales y se han tenido que tomar de los pozos.

-¿Qué es lo que queda por materializarse del plan actual?

-Pues queda todo. Esa es otra de las cuestiones que debe calar; estamos revisando el plan de 1998 como dice la ley, aplicando la directiva marco, y no haciendo un plan nuevo.

-¿En qué fase se encuentran las famosas obras de sustitución de bombeos en Albacete?

-Pues es una de las cosas que no se ha hecho. Se ha sustituido una media de 17 hectómetros cúbicos anuales, cuando deberían ser 80. Si se hubiesen sustituido los 80 ahora el acuífero podría estar cuatro o cinco metros por encima. No ha habido dinero para hacer la sustitución de bombeos, pero sí más de 200 millones de euros para hacer un trasvase al Vinalopó. Por eso al final te tienes que poner serio, y decir que si se hace ese trasvase la vamos a tener. Arregle usted primero los problemas de la propia cuenca, y después piense en trasvases con el agua que sobre, pero no me deje a mí sin agua. Lo que no puede ser es que antes, cuando había dinero, no se hicieran las obras, y ahora como no hay que nos quedemos sin ellas.

-Así que hay que conformarse con esos 17 hectómetros…

-La verdad es que en el último año han sido 32, pero es que tendrían que ser 80 en una primera fase. Afortunadamente nuestro Gobierno regional, que a mí me tenía muy preocupado porque lo veía muy parado en el tema de agua, está poniéndose las pilas y adoptando una postura que me gusta, y eso que a mí me cuesta mucho hablar bien de los gestores políticos. Han adoptado una actitud de defender un poquito la Región, que otros han hablado mucho y no han defendido nada.

-Concrete algo más porque dice que le gusta la posición del actual Ejecutivo.

-Están adoptando nuestras tesis en estos asuntos que estamos comentando, como las obras que hacen falta, o que no pueden hacerse trasvases y decirles ‘interfluvios’. Les hemos trasladado nuestro apoyo y somos los primeros interesados en que las cosas se hagan bien, porque los políticos se van o pierden las elecciones y aquí nos quedamos los demás pagando las consecuencias.

-¿Hay alguna novedad, entonces, respecto a la revisión del Júcar?

-Están trabajando con el esquema de temas importantes. Hace unos días hubo una reunión en Valencia para elevar ya al Consejo del Agua este esquema, asunto que al final no se cerró. Es que han querido fijar la demarcación sin respetar la ley por el problema de las cuencas internas valencianas, que no son Júcar y se empeñan en ello. Si hay que hacerles un trasvase se lo haremos, pero no las mezcle con el Júcar porque, además, ya hay una sentencia del Supremo del 2004 que las define y que, por cierto, nadie ha cumplido porque este país no es serio; nos quejamos de la prima de riesgo pero somos muy bananeros. El problema de las cuencas internas valencianas es que tienen poca agua. Si tuvieran mucha, ¿usted cree que Valencia querría arrimarlas al Júcar?

-El tema del agua, tan controvertido a nivel político, ¿va a quedar en segundo plano con la crisis?

-Los usuarios, los regantes, damos menos guerra, somos menos visibles, y desgraciadamente no tenemos sindicatos y organizaciones agrarias que sean realmente combativas. Es una lástima, porque con la crisis se ha demostrado que el único sector que se salva es el agrícola, y eso a pesar de que en Albacete, este año, la agricultura de secano es una ruina. Deberíamos estar apostando por consolidar lo que ya tenemos y aumentar los regadíos, porque nos hemos conformado con muy poco.

-¿Cabrían, entonces, más hectáreas de regadío en Albacete?

-Terreno de secano tenemos muchísimo. Ahora bien, tal y como están las cosas, si un día tuviésemos más agua deberíamos plantear utilizarla de una forma mucho más rentable. Regar una cebada puede ser rentable, pero lo es mucho más regar un árbol, apostar por los cultivos leñosos, porque con menos recursos se extrae más producción y valor añadido, y encima reforestamos.

-¿Se está notando ya en los planes de explotación de los agricultores cambios en los cultivos?

-Algo se nota. Ha subido el maíz, pero han bajado los hortícolas porque las congeladoras se han ido; hemos deslocalizado esta industria en la provincia. Entre unos y otros los hemos echado, también porque la energía eléctrica es mucho más cara.

-La factura eléctrica también es el gran caballo de batalla de su colectivo.

-Es un escándalo, es predicar en el desierto. Este país está manejado por la banca pero también por las eléctricas, y cada vez con más fuerza. Solo hay que ver la lista de ex políticos colocados.

-¿Cuánto les supone ya el coste de la luz?

-Un tercio del gasto de nuestras explotaciones. No es ninguna broma. Pagamos la energía más cara de Europa, pero es que además el 60% del gasto no es lo que consumimos sino en concepto de peajes, de impuestos que se sacan de la manga. Debemos pagar la energía de un año cuando solo vamos a gastar durante cinco meses. Hay un mangoneo tremendo y los políticos miran para otro lado.

-Ustedes apuestan por el autoconsumo como una manera de solucionar esa dependencia.

-La fórmula del autoconsumo está muy extendida en Europa, porque lo que nadie dice es que en las redes de transporte se pierde una cantidad enorme de energía. El ahorro está en que yo produzca al lado electricidad de mis bombas, al lado de donde se consume, y apostar por las renovables. Pero es que las eléctricas no están dispuestas a soltar ni un gramo del pastel.

-¿Sigue habiendo muchos robos en el campo?

-El problema es que el campo es muy grande, y se ha quedado despoblado. A mí es más difícil que me roben, porque vivo allí y de noche me doy una vuelta por mis riegos.

-Llegaron a plantear, incluso, la puesta en marcha de unas brigadas para mejorar la seguridad. ¿Están contentos con la actuación de las Fuerzas de Seguridad?

-La relación es buena. Les facilitamos planimetría y todo lo necesario sobre la ubicación de nuestras instalaciones, y supongo que lo están utilizando. Como experiencia piloto pusimos en marcha unas brigadas con seguridad privada, pero de lo que al final se trata es de cambiar la legislación, y si los ladrones son extranjeros que los manden de vuelta a su país. No digo que haya que hacerles nada, pero es que somos tan ‘guays’ que… Oiga usted, si nosotros ya tenemos ladrones propios.

-¿Hay más robos o menos?

-Menos. Se ve más Guardia Civil en el campo, pero es que los cogen y se van de rositas.

-¿Qué les parece el trasvase Tajo-Segura? ¿Apuestan por las tesis del anterior Gobierno regional del PSOE de ponerle fecha de caducidad?

-No se trata de suspenderlo sino de revisar la ley del trasvase, que es preconstitucional. No digo que Murcia se quede de la noche a la mañana sin agua, pero sí de poner cortapisas y que Castilla-La Mancha se quede con más agua, por ejemplo para el acuífero 23. Hay que ser solidario, pero prefiero serlo más con los de mi Región.

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